Robert Tatin, universo mágico

"La pintura no tiene nada que ver con lo que podríamos llamar progreso; demasiados tratados sobre pintura, llenos de buena voluntad tratan de describir un arte X o Y, clasificándolo, más sin saber indagar en un arte sin adjetivos.Ver es saber estar presente en el momento, sentir , aprehender y expresar esa intuición fugaz."

Robert Tatin
                                                                   

Robert Tatin : pintor, escultor, ceramista, poeta... viajero infatigable.
Fué en Thorn Avèsnieres de Laval en Mayenne, Francia, donde hacia el 1902 nació Tatin.
De familia humilde, Tatin trabajará en diferentes oficios relacionados con la construcción hasta el año 1918, en que se traslada a París con diecisiete años de edad, como ayudante de decorador.Allí paralelamente, estudió dibujo y pintura asistiendo a academias libres.Posteriormente se matricularia en la escuela de Bellas Artes de París y el  taller de pintura al fresco, de la Escuela de Artes Aplicadas.
De 1930 a 1938 Robert Tatin viajará por toda Europa y Norte de África conociendo las raíces del arte popular y la artesanía de diferentes lugares.

En 1945 y profundamente marcado por los horrores de la guerra, desidió embarcarse en una vida artística sin concesiones; es éste un punto de inflexión en su vida. Hacia 1947 funda un taller de cerámica y pintura en París participando activamente en la vida cultural de la capital junto a Cocteau, Giacometti, Dubuffet, comenzando a tener reconocimiento nacional.

En 1950 Tatin viaja a Brasil para trabajar con Matarazzo (director del Museo de Bellas Artes de Sao Paulo) en un proyecto de investigación, junto a otros expertos, sobre nuevas formas de trabajo dentro de la cerámica.Esto le llevará a mejorar sus conocimientos dentro de este campo.
Expone un año más tarde en la primera Bienal de Sao Paulo.

 Su estancia en Brasil le lleva a recorrer toda América del Sur: Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile, hasta tierra de Fuego.
Es allí donde en  contacto con el arte indígena Tatin se libera completamente de los dogmas académicos y amplía su visión del arte hacia un nuevo mundo de formas y colores, donde el corsé de lo establecido ya no puede retenerlo.
Una vez de regreso a Francia en 1955 se instala en Vence y comienza a consolidar con rigor su técnica pictórica.
En 1961 gana el primer  premio de la crítica de la capital francesa.
Un año después se traslada junto con su esposa Lise, a La Frenouse, donde fija definitivamente su residencia  y comienza lo que sería el último proyecto de su vida, y lo que todos conocemos hoy como El Museo Robert Tatin.

Valleduart.